miércoles, 22 de julio de 2020

Dworkin - Derecho & Nomas judiciales.





Imperio de la justicia

 

El presente resumen tiene como objetivo dilucidar los aspectos más importantes del tercer capítulo del libro imperio de la justicia de Ronald Dworkin titulado “retorno a la jurisprudencia”. En primer término, según el derecho la jurisprudencia es una fuente de este que se encarga de interpretar las funciones principales, tales como integrar, interpretar y velar por el progreso de la sociedad. Tiene un valor fundamental como fuente de conocimiento del derecho positivo, con el cual se procura evitar que una misma situación jurídica sea interpretada en forma distinta por los tribunales; esto es lo que se conoce como el principio unificador. Por otro lado, Se entiende por jurisprudencia a la doctrina establecida por los órganos judiciales del Estado (por lo general, el Tribunal Supremo o Tribunales Superiores de Justicia) que se repite en más de una resolución. Esto significa que para conocer el contenido completo de las normas vigentes hay que considerar cómo han sido aplicadas en el pasado. En otras palabras, la jurisprudencia es el entendimiento de las normas jurídicas basado en las sentencias que han resuelto casos basándose en esas normas.

En este capítulo Dworkin nos muestra una figura clara sobre el derecho y su interpretación. Profundiza respecto a las diferentes concepciones del derecho y es aquí donde nos ofrece un tipo de clasificación de: convencionalismo, pragmatismo legal y derecho como integridad, de estas tres concepciones el convencionalismo es la más débil de la tres y el pragmatismo legal se constituye el más fuerte y solo puede ser vencida cuando en el campo de la batalla se incluye a la filosofía política. Y concibe al derecho como la mejor interpretación de aquello que hacen y dicen los abogados, profesores de derecho y los jueces.

Al inicio del capítulo Dworkin señala que el derecho es un concepto interpretativo y al ser interpretativo requiere por parte de los jueces un arduo análisis para su comprensión. Cuando disientes en la forma que se denomina “forma teórica” sus desacuerdos son interpretativos, pero están en desacuerdo en gran medida acerca de la interpretación más sólida de algún aspecto pertinente de la practica judicial. Para Dworkin la interpretación que los jueces deben darle al derecho es muy importante para que sus convicciones interpretativas no caigan en desacuerdos teóricos a la hora de afrontar casos, donde se haga necesario un minucioso estudio de ello. Cada juez tiene sus propias teorías interpretativas que se basan en sus convicciones sobre el sentido de la práctica legal como un todo y es inevitable que estas convicciones sean diferente a la de otros jueces.

Dworkin deja entrever que tanto los filósofos del derecho como los filosofo de la justicia se encuentran en una misma situación ya que no pueden producir teorías semánticas útiles al derecho ni tampoco pueden exponer criterios comunes que sigan los abogados para colocar etiquetas legales a los hechos, dado que dichas reglas no existen. Los filósofos del derecho discuten sobre el fundamento interpretativo que cualquier argumento legal debe tener. En cualquier debate legal práctico si se quiere decir así, asume sin importar lo detallado y limitado que este tipo de fundamento abstracto le ofrece a la jurisprudencia. Y cuando los fundamentos legales compiten, el argumento legal asume uno de ellos y rechaza otros y así mismo  la opinión de cualquier juez es en sí misma filosofía del derecho aun cuando esta opinión puramente filosófica se encuentre escondida y el argumento visible este dominado por una lista de hechos.

El filósofo del derecho empieza gozando de una identificación preinterpretativa nada polémica del terreno del derecho y no con unos paradigmas que apoyen su argumento y comprometan a sus competidores en la forma habitual. Pero surge aquí una cuestión y es que si él y los competidores deben estar de acuerdo con una declaración del concepto central de su institución que les permita ver sus argumentos con una cierta estructura como argumentos sobre concepciones rivales de dicho concepto.

El positivismo afirma que el derecho y la ética están hechos por reglas semánticas distintas que todos aceptan para utilizar el “derecho”, pero el derecho natural afirma por el contrario que ambos se encuentran articulados por reglas semánticas. Que algo no sea ético no quiere decir que deba ser sancionado por el derecho. La ética influye en las normas de conducta sociales, sin embargo la moral influye en las formas de conductas de los seres humanos dentro de una sociedad. Ahora bien el derecho se define como el conjunto de normas de obligatorio cumplimiento que regulan la vida en sociedad. El derecho y la ética se encuentran separados semánticamente aunque algunos piensen que estos si se encuentran relacionados el uno y el otro. Por una parte la ética como lo mencione anteriormente son esa serie de normas que una persona debe aplicar y el derecho son normar legales que debe seguir y cumplir una persona dentro de un estado. Una relación que ambos pueden guardar es que tanto el derecho como la ética le exige al sujeto el cumplimiento estrictos de sus normas y la aplicación de estas.


Análisis de los libros VI,VII & X - La Republica





Libro VI Análisis

 

Antes de iniciar con el análisis del libro VI de la república quiero traer a colación la frase del filósofo ingles Alfred Nort Wihitehead el cual llego afirmar que “la manera más segura de describir el conjunto de la tradición filosófica occidental es presentarla como una serie de acotaciones a Platón”. Y es que si se quiere decir este libro VI de la república es considerado es el corazón de todo el pensamiento platónico, puesto que uno de los temas más emblemáticos de este libro es el desarrollo que platón expone a sus interlocutores de la idea del bien comparándola con la analogía del sol. 

Sócrates propondrá un sistema educativo en el cual los futuros filósofos gobernantes van a ser educados, ya que son  los únicos que pueden poner en práctica el régimen de estado descrito y propuesto por Sócrates en los libros anteriores al VI. Un régimen donde haya una comunidad de bienes en la cual todo debe ser compartido y donde quienes lo gobiernen un alma de oro, es decir, el filósofo gobernante. En este estado descrito por Sócrates tampoco debe existir la propiedad privada para los que gobiernen, puesto que los que se encuentran en el poder gobernarían en pos de sus bienes y no en el desarrollo del estado.

Esto ha causado que algunos intérpretes de Platón afirmen que Sócrates fue el primero que expuso un estado comunista siglos antes que Marx. Este estado también deberá ser un estado justo donde todos realicen las actividades que les corresponde, donde los guardianes se encarguen de la seguridad del estado y sean educado en la música y la gimnasia y donde los artesanos realicen lo correspondiente a la alimentación de los ciudadanos del estado. Los poetas serán expulsados por Sócrates de su estado ideal porque su arte se basa en mera imitación.

 

Una de las frases más celebres que nos ha dejado la república es: “no cesaran los malos de los estados hasta que los filósofos gobiernen o que por un don divino los que gobiernen se dediquen a la filosofía”.  Sócrates se pregunta sobre que es el bien? y para dar una definición del bien lo hace no basándose con la idea del bien en sí mismo, sino como el hijo del sol, por lo tanto Sócrates para hablar de esta idea recurre a la alegoría del sol para explicárselo a sus interlocutores. Ahora bien explica el filósofo ateniense que así como la luz hace posible la vista de los objetos en el mundo visible, así la idea del bien hace posible que la inteligencia vea en el mundo inteligible y así mismo como el sol le otorga a las cosas conocidas y existentes el crecimiento y la nutrición, así la idea del bien otorga a las cosas conocidas el existir y la esencia.

La idea del bien es la condición de posibilidad de todas las ideas, pero ella misma no es la idea, tiene un estatus epistemológico superior, dado que hace posible que estas puedan ser. En otras palabras podríamos afirmar que esta idea del bien es una causa incausada que no es producida por nada exterior a ella o en palabras de su discípulo Aristóteles diríamos que es el motor inmóvil que no es movido por algo, sino que él es el generador de todo movimiento. De esta forma es también la idea el bien ya que esta es la causa para que otras ideas en el mundo sensible puedan ser contempladas por nuestros sentidos.

Analogía de la línea: En el cual se plantea los grados del ser y el conocimiento del mundo. En relación con su pertenencia al mundo de las ideas, existen distintas maneras del ser, que se conocen mediante diferentes métodos. En su ascenso al saber, Platón habla de un trayecto de conocimientos que se debe llevar a cabo para llegar finalmente a la idea de bien, la que permite conocer tanto el mundo de las ideas como el sensible y comprender todas las relaciones trazadas por cada ser. Sócrates va a decir que lo concerniente al reino de lo visible le corresponde la opinión y al reino de lo inteligible la ciencia.

En conclusión para Platón la idea del bien es lo que da la condición de verdad a los objeto cognoscibles, es decir, el poder conocerlos, contemplarlos etc… en otras palabras es la fuente de conocimiento en el hombre. El bien como anteriormente se ha mencionado es comparado con el sol que da a los objetos no solo la posibilidad de ser vistos, sino también de crecer y nutrirse, de esta forma la idea del bien es la fuente de la verdad.

 

 

Libro VII Análisis

 

En este capítulo de la república se encuentras la famosa alegoría de la caverna donde Sócrates expone la situación de unos presos al interior de ella que constantemente son engañados por una serie de imágenes que son producidas por unos titiriteros. Estas imágenes son unas sombras que pasan al frente de ellos reproducidas por la luz que proviene de afuera de la caverna. Podríamos interpretar que la alegoría de la caverna simboliza el mundo sensible que es aparente y engañoso, o la ciudad ateniense dominada por la retórica de los sofistas o si queremos llevarlo a nuestros días podemos pensar que la caverna son todo esos medios engañosos que constantemente se presentan con apariencia falsa. Un ejemplo de ello sería la televisión y los distintos medios de comunicación que nos quieren adoctrinar con ideologías falsas.

Ahora bien, esta alegoría no pretende ser ingenua ni tampoco pretende ser todos esos medios engañosos, sino más bien que pretende ser una huida o liberación de todas esas cadenas que los sistemas poderosos de un estado han querido instaurar en los ciudadanos. Platón con esto también tiene objetivo bastante claro y marcado que es político y moral el cual es imponer un sistema político gobernado por el rey filosofo que conducirá al estado a practicar la justicia y el bien.

Un objetivo bastante marcado  en la interpretación de la alegoría de la caverna es que una vez lindero de las cadenas nosotros tenemos el deber moral de descender al interior de ella y comunicar a nuestros antiguos compañeros de presidio la idea del bien. Pero qué pasaría si alguien fuese liberado y forzado a salir de la caverna? Sin duda le costaría en principio identificar los objetos que pasan al frente suyo porque le molestaría el fuego que se produce en el interior de la caverna, y si también se le preguntara que le parecería más real si los objetos en las sombras se inclinaría claramente por las sombras ya que es lo único real que aparentemente puede observar por las y su condiciones de preso. Y si también se le dijera que eso objetos y sombras que observa son mucho más reales de lo que piensa? Acaso su visión no le costaría créelo? Así que ayudarlo a salir de su condición sería un camino de mucho esfuerzo lo que significa que el camino hacia el conocimiento es arduo y difícil para aquel que no está acostumbrado a contemplar la idea del bien.

Según Jaeger el proceso de salida de la caverna al mundo de las ideas implica un proceso de conversión como el religioso donde el prisionero se libera de su antigua vida para ascender a una nueva donde dejara atrás los engaños y empezara a caminar por los senderos de la verdad. El filósofo una vez ha alcanzado el conocimiento de la idea del bien se compadecería de los que todavía se encuentran esclavos dentro de la caverna y miraría con algo de rechazo los honores que se tributaban unos a otros según iban adivinando las sombras que pasaban por su frente. A los personajes que propiciaban las sombras al interior de la caverna las podemos asociar con los políticos de la época de Platón, educados en la retórica sofista y expertos en la manipulación y en el arte de hacer pensar como realidad lo que no son más que sombras y mentiras.

La alegoría de la caverna no es más que la continuación que Sócrates realiza en el libro VI acerca de la alegoría de la línea, donde se expone ese mundo inteligible con el mundo sensible que claramente se encuentra expuesto en el libro VII de la república. En el esquema se encuentra descrito de una manera racional y argumental y en la imagen de la alegoría  de la caverna se revela más bien el carácter pedagógico de Sócrates con sus interlocutores.  Es importante reflexionar que la liberación que se da al interior de la caverna también tiene un grado altamente educativo, puesto que Sócrates proponía para la Atenas de su época un modelo educativo totalmente distinto al que estaba acostumbrada Atenas, que era en base a la poesía y enseñanza de homero y los dioses. “la educación nos hace libres” esta frase nace en el seno del platonismo y que hasta nuestra época sigue vigente en los distintos movimientos estudiantiles de nuestro país.

 

 

Libro X – Análisis

 

Al comienzo de este libro Sócrates va analizar el papel de la poesía y cuál ha sido su influencia en la educación ateniense y como los poetas se han convertido en simples imitadores de la realidad, pero que estos no han sido capaces de hablar de la realidad en sí misma. Ya anteriormente en los primeros libros Sócrates exponía el carácter educativo que tenía la poesía en la polis griega, exactamente en la comunidad de los guardianes. Algo interesante es que el filosofo ateniense excluye totalmente a los poetas del proyecto educativo que él quería establecer para Atenas, la cual estaba encaminada hacia la justicia, la cultivación de la virtud y el ideal de bien.

Sócrates después de haber expuesto claramente cuál debía ser la educación  que debían recibir los guardianes (la música y la gimnasia) en este libro X el filósofo ateniense le da a la poesía un valor bastante degradado con lo que la disputa entre filosofía y poesía a la hora de educar a los ciudadanos de Atenas será aún mayor. En este sentido Sócrates analizara la poesía centrándose en su auténtico valor imitativo, pero parte de este análisis lo desarrollara a la luz de la teoría de las ideas, es decir en la idea del bien en sí mismo. Por un lado establece que una idea es el conjunto que designa muchas cosas, por ejemplo: un carpintero elabora una cama o una mesa en base a la idea que tiene previamente de la cama y de la mesa. Entonces cuando este carpintero está construyendo la cama no está elaborando la idea de cama en sí misma, sino que la construye en base a la existencia de la idea de cama. Pero la crítica que sostiene Sócrates si se quiere ver así va mucho más allá, al decir que existen algunas personas que se limitan a producir cosas que ya están creadas, como los pintores que dibujan en sus cuadros muebles, camas y mesas. Lo que nos hace pensar que para Sócrates estas personas lo que reflejan en sus trabajos es nada más que apariencias de la realidad y no la realidad en sí misma.

Dicho lo anterior podríamos establecer que Sócrates quería exponer era la diferencia entre lo real y lo aparente. Es así como lo real no es la cama que elabora el carpintero y menos la que es pintada por un pintor, lo real es entonces, la idea sobre la cual se elabora tal cosa. Sócrates recurre a la poesía de homero para decir que aunque estos conocían los asuntos humanos relacionados con la excelencia e incluso con los asuntos divinos, su conocimiento no era conocimiento real, sino una imitación del conocimiento como la del pintor. En este libro X también se expone el tema de la inmortalidad del alma el cual explica Sócrates de manera detallada, estableciendo que cuando algo no perece a causa de un mal propio ni ajeno, es evidente que ha de existir siempre y por ende es inmortal. Por más que el cuerpo se destruya en pedazos, el alma no muere, sino por el contrario, sigue viva. El alma puede volverse injusta e impía, pero no por eso implicaría necesariamente su destrucción, más bien su corrupción.


lunes, 6 de julio de 2020

Ensayo sobre el pensamiento crítico en la escuela de Frankfurt



“Lo feo como elemento crítico en la sociedad”


Este presente ensayo  tiene como propósito fundamental, analizar y presentar los conceptos de lo feo, lo bello y la técnica en relación con la sociedad. Para ello, tendremos que buscar en la historia del arte, lo cual extrae su concepto de las constelaciones históricas. En consecuencia, el concepto del arte no se puede definir, ya que esta predeterminado por aquello que una vez fue, pero solo se puede hallar o adquirir justificación sobre aquello que pueda ser.La historia del arte, es la evolución del arte mismo a través del tiempo, por medio de ello, se pueden expresar las emociones, sensaciones o ideas que se tiene sobre la visión del mundo. En este sentido, entra la idea de la estética sobre el arte y sobre cómo la sociedad admira todo lo que le rodea. Se puede entender por arte, toda manifestación o creatividad que posee el ser humano, es así como el hombre sería mediador de creación del arte, además seria también este ser humano quien la contemple en su valor cultual, en su halo sagrado y en sí misma.El arte es cultura, música, danza, poesía, pintura, cine, etc... La historia del arte viene con un inicio previo del renacimiento, pero de forma limitada. Con el paso del tiempo, se ha presentado sobre esta, una visión más amplia, tratando de mostrar una descripción universal de todas las civilizaciones. Es así como el arte no se queda o no termina sobre el concepto de lo bello, por lo que se es necesario de lo feo para su propia negación. Lo feo puede ser definido a través de la belleza, pero solo debe ser entendido sobre su contexto histórico, es decir, lo feo es lo pasado que, a su vez, es rechazado por el arte con el fin de buscar su autonomía.El arte entonces, no sería nada sino acepta su historia, sobre ello, la dialéctica de lo feo incluye la categoría de lo bello. He aquí donde entra el aspecto social, en lo cual, el arte debe servir como mediador para denunciar su reducción, y esto, solo lo puede hacer con ayuda de lo feo (el arte a través de la historia ha sido una herramienta de manifestación social cuyo fines siempre se han visto por la consecución de una sociedad menos corrupta y más incluyente).La categoría de lo feo se inclina contra esa identificación de lo feo con la expresión de dolor. Lo feo es así, el empuje o el motor del arte, y conduce a este a pensar más allá de sus propias ideologías. Luego de mostrar a lo feo como una categoría social, que no permite su definición, expresaré como se es visto la categoría de lo bello, la cual, a su vez, según T. Adorno niega su determinación en el texto, la categoría de lo feo, lo bello y la técnica.Con lo anterior, los elementos que en la actualidad se denominan o se miran en la sociedad como feo, dentro de su contexto histórico pudieron haber sido denominados bellos y no feos, por lo que no se tiene el juicio concreto de la antigüedad, es así como no se podrían conocer en la actualidad.Sobre la denuncia que hace el arte sobre lo prohibido, el arte debe manifestarse como forma de protesta para mostrar a la sociedad, la realidad. Es así como la manifestación de lo feo también tiene que verse con lo estético, para mostrar valores que tengan que ver con la crueldad. Por ello, en la sociedad, las personas, como primera instancia no deben limitar lo feo para su fijación. Segundo, se debe estudiar la obra de arte por quien la contempla, para así, poder ser interpretada sobre su totalidad. En consecuencia, lo feo como crítica hacia la sociedad, debe ser visto no como la primera reacción que se tiene sobre ello, sino como forma de admiración, es decir, se debe observar lo que es determinado como feo, para luego mostrar o tener evidencia sobre ello.Se debe tener una verdadera percepción de lo feo, y si aun así, se muestra como feo, se debe tener una acepción o determinación sobre ello. Es decir, se tiene una actitud negativa ante lo feo, por ello, el hombre en contraposición de lo bello, presenta obstáculos a la libre manifestación de las fuerzas vitales. Solo con el hecho de mostrar esa contraposición, la sociedad se ve limitada sobre la forma negativa y positiva de lo feo. Así mismo, con el paso del tiempo, se hace necesario la conformación de una nueva sociedad, ya que, sobre el pasado muchas veces se tiene conciencia solo de lo feoEn esta perspectiva, lo feo puede considerarse bello desde el punto de vista de una sociedad. Por ello, el punto de vista es predominante para la ratificación de lo feo sobre una sociedad, es así como lo feo, aparece como una disminución armónica. Sobre esa disminución, ya se ha presentado con anterioridad una primera impresión visual, lo cual, conlleva a una comparación de lo bello y lo feo.En este punto, cabe presentar la idea del surrealismo (movimiento literario y artístico), lo cual busca transcender lo real a partir de la imaginación. Siempre omiten el sentido racional sobre la verdad, estos solo se basan en expresiones de imaginación a través de imágenes. Es decir, solo su imaginación es desarrollada al contemplar imágenes que conllevan a la expresión de emociones, sensaciones.La sociedad por su parte, escapa de lo feo, lo grotesco, lo monstruoso, pero a la vez, se siente en una búsqueda o atracción inevitable de lo feo. En cada ser humano, se encuentra ese deseo suprimido por experimentar lo prohibido, lo no agradable. Es así como no podemos explicar cómo nos sentimos atraídos hacia ello; es algo que se esconde en la conciencia del ser humano y que en cualquier momento de su vida sale a flote, expresando así, esa necesidad de conocer la realidad sobre lo feo. Por ello, los deseos suprimidos en el arte, toman inicio o mayor protagonismo en el surrealismo, ya que, es solo en los sueños y en las creaciones artísticas en donde se subliman los deseos y pensamientos negados sobre la realidad. La idea de vanguardia surrealista, es crear el inconsciente del pensamiento, para así, no tener que intervenir en la razón.Toda esta lucha existente entre lo bello y lo feo hace preguntarnos si se puede establecer una relación entre ellos. En este sentido, la idea de belleza, es atraído o arraigado por la costumbre y la cultura en la que nos desarrollamos, lo cual, se introduce en nuestra percepción, esto sin dejar de lado el pasado de cada persona, es decir, si bien la sociedad es la que nos introduce o nos define los diferentes tipos o cánones de belleza, es el individuo quien debe tener conciencia sobre ello, para así, considerarlo como estético o  no estetico.Desde la antigüedad hasta nuestros tiempos, hemos tenido el claro ejemplo del impulso obligatorio por responder hacia lo denominado o establecido como bello. Desde la vanguardia artística, la belleza pierde su carácter hegemónico, y se comienza a ver como un instrumento de ridiculización, por la búsqueda insatisfecha de la sociedad por conocer toda la realidad de lo bello, así, fue como se introdujo el contrapuesto a esta, ya que, debido a esa necesidad de buscar lo bello, nace en sí también la búsqueda de saber a lo que le llaman feo.En la actualidad, el ser humano se encuentra sobre un sentido opuesto, es decir, se encuentra sobre una imitación de esa búsqueda por saber o reconocer lo que en su momento fue bello y que ahora es feo, o en su sentido estricto, todo lo contrario, a ello. En otras palabras, la determinación de lo feo se ha convertido en el núcleo del propio arteAsí como lo feo contiene un elemento crítico que se asocia con lo grotesco, también entra el concepto de lo ridículo que, a su vez, puede ser algo feo. En Adorno, lo que se llega a criticar es esa motivación del artista que se presenta como deseo reprimido, por ello, lo que se debe mostrar en relación al artista, es que este tiene que aceptar, asimilar a la sociedad.La fealdad se muestra como elemento crítico, que busca de acercar su descripción o aserción como feo, como elemento liberador, transformador de la sociedad, esto como sentido de formas de buscar o ver lo real, es así como el individuo en la sociedad, debe irrumpir sobre ello para crear o asociar lo que en verdad en la actualidad es catalogado como feo o como bello. Al entrar ese elemento liberador en el individuo, lo feo deja de mostrarse de forma limitada, es decir, lo feo en la sociedad siempre trata de ir más allá de los límites que se le presenta.Un claro ejemplo de ello es, los animales que en un momento fueron determinados como feos, salvajes, y que de cierto modo acabaron o se encuentran en extinción. En la actualidad son considerados como bellos, es decir, es el paso de la historia lo que define lo que es bello o feo. En este sentido, ¿acabar con las especies de la naturaleza también sería feo?, desde esta concepción, acabar con las especies de la naturaleza si sería un acto de crueldad, de fealdad. Por ello, se es necesario considerar lo que en sí es feo o cruel, y se es necesario en la sociedad un elemento crítico y analítico que sirva como ayuda para que el individuo se autoevalúe ante sus actos de crueldad.He aquí donde debe entrar lo racional en el ser humano, es decir, el ser humano debe ante esos actos de crueldad, actuar de acuerdo con la razón y así, dejar de lado los impulsos que conllevan a ello, el ser humano tiene que empezar a tomar decisiones sobre esos actos. Esto con el fin de acabar con ese elemento irracional que también reposa en la conciencia del hombre.En esta medida, lo bello se sostiene la necesidad de lo feo en la sociedad, y viceversa; es así como lo feo se mira de forma positiva en la sociedad, ya que, se debe examinar bien su elemento liberador racional sobre el hombre, para así, mostrar el impacto que este ocasiona en una sociedad.En definitivas, el ser humano y su fuerza Son las fuerzas en tensión de lo feo y lo bello lo que no nos permite quedarnos en la indiferencia al contemplar obras como éstas, que nos dejan fascinados y nos hacen olvidar la ética y la moral para liberar nuestra mente a una estética diferente.Llegamos a pensar entonces en la gran cantidad de aspectos que rigen los conceptos de belleza y fealdad y en la manera en que cada uno de nosotros los percibe. Desde el deseo de indagar en lo prohibido hasta las limitaciones éticas, pasando por los cánones culturales y la apreciación individual, las sensaciones estéticas van gestándose continuamente y resulta imposible definirlas de manera uniforme.En la sociedad en la que nos encontramos, el concepto de belleza y de fealdad han sido elementos de plena discusión, por ello siempre se tendrá en cuestión y en debate la concepción de cada uno, los cuales han tenido su grado de importancia desde la antigüedad hasta nuestro presente.Así, el sentido o lo definido como feo, ha tenido un desagrado o ha sido discriminado en la sociedad, en este sentido, lo feo se ve como forma de burla, fastidio ante el ser humano. Aunque existen quienes defienden esta concepción, no está de más mostrar un paralelo de las dos orillas sobre el concepto de lo feo.Esto es una realidad en la sociedad, ya que, la mayoría de las personas al tener ya en sí una visión sobre algo agradable, pone en cuestión una segunda visión sobre algo nuevo, es decir, en cierta forma el ser humano se ve en problemas al admirar otra cosa y determinarla como bello o feo en sí.Para poder superar esta dicotomía, se es necesario incluir ambos conceptos en la sociedad, esto con la finalidad de no discriminar el concepto de lo feo que también se encuentra arraigado en la sociedad existente. Así mismo poniendo como demanda la aplicación correcta de estos términos en sentido de forma y contenido para verdadera aplicación ante la sociedad.En definitivas, la sociedad debe abrirse al término de fealdad en sentido de análisis y de construcción hacia nuevas miras para el desarrollo sostenible de lo feo en el individuo. En la actualidad es más fácil apreciar algo feo que bello, puesto que lo bello significa o contiene un término de perfección sobre sí.Las cosas son bellas o feas según el observador; por ejemplo, en el arte hay obras que a ciertas personas les llama la atención, mientras que otras personas no le encuentran sentido alguno. La fealdad es algo que el individuo quiere ver como feo, es aquello que no nos satisface ni nos llena, cuando nos referimos que algo es feo, es porque tiene algún defecto o que no es para el ser humano, agradable. Es así como lo feo se expresa mediante un juicio emitido por la sociedad para clasificar lo que no es aceptado.En conclusión con todo lo expresado anteriormente, el arte debe ponerse como instrumento mediador para en sí exponer al individuo o al artista para asociar e integrar cada vez más el termino de lo feo en todos nuestros contextos socio históricos. Y como forma de descubrir, ampliar, y aceptar en nuestra sociedad lo que es definido en un determinado tiempo y espacio. La determinación de lo feo, va en el interpretar, en el análisis y en las razones que un individuo posee para catalogar un objeto, animal, persona u obra de arte como feo.

 

 

 

 

 

 

 

BibliografíaAdorno, Theodor W. teoría estética (1970). Las categorías de lo feo, de lo bello y de la técnica.ttps://fido.palermo.edu/servicios_dyc/publicacionesdc/vista/detalle_articulo.php?id_articulo=9289&id_libro=458Martínez, Lucia, (2012) – Vol. 7 – Número VII – Resistencia, Chaco, Argentina. El lugar de la técnica en la teoría estética.

Rosenkranz, Karl (1992), estética de lo feo

jueves, 2 de julio de 2020

Riesgo de contagio



 



Mi cuerpo me dicta que a nadie ya me le acerque más. En cambio, mi mente no entiende razones e ignora que todo afuera está mal. Mi cuerpo conoce el peligro que poso ante los demás, en cambio, mi mente me dice: “Total, esto es el final”. Solo quiero saber qué de todo esto es real, no sé qué creer, no se que pensar. Como quiera no hay en quien (...) 

El riesgo de contagio es inminente !!!

No sé ni quién soy, no sé dónde estoy si veo uno, veo dos, este mal creo que es mental.  


Mi cuerpo me dijo, "es muy alto el riesgo de contagiar" En cambio, mi mente está ocupada en poemas de Sylvia Plath. Mi cuerpo está muy consciente de la actual pandemia y mi mente juega play station, en plena cuarentena. Solo quiero saber cuál de todas es la verdad, no es cuestión de fe, aleluya, amén como quiera no hay quien, no hay quien. No me quiero contagiar. En esta conversación creo que estoy solo yo, me encerraré en mi hogar viendo solo el reloj y deseando que todo esto pase.





Analisis de los libros I & II de la Repùblica de Platòn

Dialogo la República   Introducción Platón fue el primero en sostener que la educación debe estar al servicio del Estado. Esto lo llev...